Cariño...
Dios me regaló algo
tan valioso que le
estaré agradecid@
por toda la vida.
¿Sabes qué es?...
tus besos, tu cariño,
tu ternura... Tu Amor.
Simple y únicamente
tú. ¿Qué más
le puedo pedir?.
Nada más!
Tu me haces vivir
en un sueño
del que no quiero
despertar jamás.
Nada en este mundo
es tan fuerte como
para quitarme la
felicidad que me das.
Quiero estar contigo
no solo hoy y
mañana, sino toda
una eternidad.
Necesito compartir
todo contigo, mis
alegrías,
mis secretos.
Que tus planes sean
mis planes, y que
mis sueños
sean tus sueños.
Porque he llegado a
amarte de manera tan
intensa que hasta
yo me desconozco.
Mi amor... todo lo que
dije se resume en
dos simples
palabritas: ¡Te Amo!
Eres mi gran amor,
un regalo que Dios
me hizo
para hacerme feliz.
Te deseo cada vez
más. Y cada día
te siento
más cerca de mí.
